Cuando se habla de evaluar el nivel de inglés para fines académicos, profesionales o migratorios, surgen dos opciones muy populares: el TOEFL y el Cambridge. Ambas son pruebas reconocidas a nivel internacional, pero no siempre es claro cuál de ellas es la más adecuada según las necesidades de cada persona. En este artículo, exploraremos en profundidad cuál es mejor entre el TOEFL y el Cambridge, destacando sus características, estructuras, usos y diferencias para ayudarte a tomar una decisión informada.
¿Cuál es mejor, el TOEFL o el Cambridge?
La elección entre el TOEFL y el Cambridge depende en gran medida de los objetivos del postulante, ya que ambos exámenes están diseñados para evaluar el inglés de una manera específica. El TOEFL (Test of English as a Foreign Language) es ampliamente utilizado por universidades en Estados Unidos y Canadá, y se centra en el inglés académico, lo que lo hace ideal para quienes buscan estudiar en instituciones angloparlantes. Por otro lado, el Cambridge, ofrecido por la Universidad de Cambridge, incluye varias certificaciones como el FCE, CAE, CPE, entre otros, y es más enfocado en el uso del inglés en contextos profesionales o académicos, pero con un enfoque más variado en cuanto a la lengua.
Un dato interesante es que el TOEFL tiene su origen en 1964, creado por el Educational Testing Service (ETS), con el objetivo de evaluar la capacidad de los no hablantes nativos de inglés para asistir a universidades en Estados Unidos. Por otro lado, el Cambridge English Language Assessment, parte de la Universidad de Cambridge, ha ofrecido exámenes de inglés desde 1913, lo que lo convierte en una de las instituciones más antiguas en la evaluación de idiomas.
Además, el TOEFL está disponible en formato digital (iBT) y en algunas regiones en formato de papel (PBT), mientras que el Cambridge ofrece exámenes presenciales y, en algunos casos, exámenes en línea. Esta diferencia puede ser un factor importante si vives en un lugar con acceso limitado a centros de prueba.
También te puede interesar

Cuando se trata de elegir entre dos de las marcas más reconocidas en el mundo del calzado deportivo, muchas personas se preguntan cuál es la opción más adecuada para sus necesidades. Esta comparación entre Nike y Asics no solo se...

Al momento de iniciar sesión en Tinder, una de las aplicaciones de citas más populares del mundo, muchas personas se preguntan cuál es la mejor forma de registrarse: ¿usando su cuenta de Facebook o introduciendo su número de teléfono? Esta...

En el mundo de Pokémon GO, elegir entre dos criaturas como Slowbro y Slowking puede ser un desafío para muchos entrenadores. Ambos Pokémon tienen habilidades únicas, movimientos poderosos y tipos complementarios que los hacen valiosos en batalla. Sin embargo, para...

En el mundo de las pantallas y la calidad visual, una de las preguntas más frecuentes es ¿qué es mejor entre Full HD y 4K? A medida que los dispositivos electrónicos evolucionan, los usuarios se enfrentan a una diversidad de...

Cuando se trata de mejorar el rendimiento y la estética de un automóvil, una de las decisiones más importantes que un conductor puede tomar es elegir entre suspensión con coilover o resortes convencionales (springs). Estas dos opciones ofrecen distintas ventajas...

Elegir entre ser directora general o directora en una empresa puede parecer una decisión sencilla, pero detrás de ella se esconde una complejidad que depende de múltiples factores como el tamaño de la organización, los objetivos estratégicos, el perfil personal...
Comparando dos exámenes reconocidos internacionalmente
El TOEFL y el Cambridge son dos de los exámenes de inglés más prestigiosos del mundo, pero su estructura y enfoque son bastante distintos. El TOEFL está dividido en cuatro secciones: lectura, escucha, habla y escritura, todas ellas basadas en contextos académicos. Por su parte, el Cambridge, dependiendo del nivel que elijas (por ejemplo, B2 First, C1 Advanced, C2 Proficiency), puede evaluar habilidades en escuchar, leer, escribir y hablar, pero con un enfoque más general que puede incluir contextos laborales, sociales y académicos.
Otra diferencia notable es la duración. El TOEFL iBT dura aproximadamente 3 horas y media, mientras que los exámenes Cambridge suelen durar entre 1 y 3 horas por sección, dependiendo del nivel. Esto puede afectar a los postulantes que necesitan realizar múltiples exámenes o que tienen limitaciones de tiempo.
Además, el TOEFL es conocido por su enfoque estrictamente académico, lo que lo hace ideal para quienes buscan ingresar a universidades en Estados Unidos. En cambio, el Cambridge es más flexible, ya que puede ser aceptado por instituciones en más de 150 países y es reconocido por organizaciones como el British Council, el Ministerio de Educación en varios países y por empresas multinacionales.
Diferencias en la puntuación y los requisitos
Una de las diferencias más importantes entre el TOEFL y el Cambridge es el sistema de puntuación. El TOEFL iBT se califica en una escala de 0 a 120 puntos, con 30 puntos por cada sección. La mayoría de las universidades estadounidenses exigen un puntaje mínimo general de 80 o más, aunque algunas pueden requerir más de 100 puntos para carreras competitivas. Por otro lado, el Cambridge tiene una escala de niveles según el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas (MECR), con exámenes como el B2 First, C1 Advanced y C2 Proficiency, cada uno correspondiendo a un nivel específico de dominio del inglés.
Otro punto clave es que el TOEFL está disponible en más de 5000 ubicaciones en más de 150 países, lo que lo hace más accesible en muchas regiones. El Cambridge, aunque también está disponible en muchos países, puede tener menos centros de examen en algunas localidades, lo que podría ser un desafío para algunos postulantes.
Ejemplos prácticos de uso del TOEFL y el Cambridge
Para ilustrar mejor el uso de ambos exámenes, consideremos algunos ejemplos. Un estudiante que quiere estudiar en una universidad estadounidense probablemente necesitará presentar el TOEFL, ya que muchas instituciones exigen este examen como parte de su proceso de admisión. Por ejemplo, la Universidad de Harvard requiere un TOEFL de al menos 100 puntos. En este caso, el TOEFL es la mejor opción, ya que está diseñado específicamente para ese propósito.
Por otro lado, si una persona busca trabajar en una empresa internacional que valora los estándares europeos de inglés, podría optar por el Cambridge C1 Advanced o C2 Proficiency. Por ejemplo, compañías como Accenture o Deloitte pueden requerir una certificación Cambridge como prueba de idioma para posiciones gerenciales. En este caso, el Cambridge es más adecuado.
También existen casos donde ambos exámenes pueden ser útiles. Por ejemplo, una persona que quiere estudiar en Reino Unido y luego trasladarse a Estados Unidos puede presentar el Cambridge para su admisión universitaria y luego prepararse para el TOEFL si decide continuar sus estudios en otro país.
El concepto de nivel de inglés y su relación con ambos exámenes
El nivel de inglés que una persona posee tiene una relación directa con el examen que debe elegir. El TOEFL se basa en el inglés académico, lo que implica que evalúa habilidades específicas para la comprensión de textos universitarios, discursos académicos y la producción de escritos formales. Por el contrario, el Cambridge evalúa niveles según el Marco Europeo Común, lo que permite a los postulantes demostrar su dominio del inglés en contextos variados.
Por ejemplo, el Cambridge B2 First es equivalente al TOEFL iBT 80-89, mientras que el Cambridge C1 Advanced equivale a un TOEFL de 90-102. Estos niveles pueden ser importantes si el postulante busca empleo o estudios en países que reconocen el MECR como estándar de evaluación.
Otro aspecto a considerar es que el Cambridge ofrece un enfoque más práctico, con énfasis en la comunicación efectiva, lo que lo hace más adecuado para personas que buscan usar el inglés en entornos profesionales o sociales. El TOEFL, en cambio, es más técnico y orientado a la academia.
Recopilación de ventajas y desventajas del TOEFL y Cambridge
Ambos exámenes tienen ventajas y desventajas que deben evaluarse según las necesidades del postulante. A continuación, se presenta una comparación general:
Ventajas del TOEFL:
- Aceptado por más de 11,000 instituciones en Estados Unidos y Canadá.
- Evaluación enfocada en el inglés académico.
- Disponible en formato digital y en línea.
- Mayor número de centros de examen en el mundo.
Desventajas del TOEFL:
- No es tan reconocido en países europeos.
- Puede ser más costoso que el Cambridge.
- Enfoque estrictamente académico, lo que puede no cubrir necesidades profesionales.
Ventajas del Cambridge:
- Aceptado en más de 150 países.
- Evaluación según el Marco Europeo Común de Referencia (MECR).
- Más opciones de niveles para distintas habilidades.
- Mayor variedad de contextos lingüísticos (académico, laboral, social).
Desventajas del Cambridge:
- Menos centros de examen en algunas zonas.
- Puede no ser aceptado por universidades en Estados Unidos.
- Menos enfocado en el inglés académico que el TOEFL.
Evaluando el costo y la disponibilidad de los exámenes
El costo es un factor importante a la hora de elegir entre el TOEFL y el Cambridge. En general, el TOEFL iBT tiene un costo que oscila entre los $300 y $400 USD, dependiendo del país. Por otro lado, los exámenes Cambridge tienen precios similares, aunque pueden variar según el nivel y la ubicación. Por ejemplo, el Cambridge C1 Advanced cuesta alrededor de $250 USD en Europa, pero puede llegar a $350 USD en otros continentes.
En cuanto a la disponibilidad, el TOEFL se puede tomar varias veces al año en la mayoría de los países, lo que permite a los postulantes elegir una fecha conveniente. El Cambridge, aunque también está disponible con frecuencia, puede tener menos fechas disponibles en algunas regiones, lo que puede limitar la flexibilidad.
Otra consideración es que el TOEFL está disponible en formato en línea, lo que facilita la presentación desde casa, especialmente durante situaciones de movilidad restringida. El Cambridge, en cambio, aún se presenta principalmente en centros autorizados, aunque algunos niveles ya ofrecen opciones de examen digital.
¿Para qué sirve presentar el TOEFL o el Cambridge?
Presentar el TOEFL o el Cambridge puede servir para múltiples propósitos. El TOEFL es esencial si planeas estudiar en Estados Unidos, Canadá o Australia, ya que la mayoría de las universidades exigen este examen como parte del proceso de admisión. Además, algunos programas de becas internacionales también lo requieren.
Por otro lado, el Cambridge es ampliamente aceptado por instituciones en Reino Unido, Europa, Asia y América Latina. Muchas empresas multinacionales también lo reconocen como prueba de nivel de inglés, lo que lo hace ideal para quienes buscan oportunidades laborales en el extranjero. Además, ciertos países, como España o Francia, aceptan el Cambridge para tramitar visas de trabajo o residencia.
Tanto el TOEFL como el Cambridge también son útiles para mejorar el inglés de una manera estructurada, ya que los preparatorios para ambos exámenes ofrecen un enfoque metódico en las cuatro habilidades: escuchar, hablar, leer y escribir.
Alternativas al TOEFL y al Cambridge
Si bien el TOEFL y el Cambridge son dos de los exámenes más reconocidos, existen otras opciones que pueden ser igual de válidas según el contexto. Por ejemplo, el IELTS (International English Language Testing System) es otra opción popular que combina elementos de ambos exámenes. Es aceptado por más de 10,000 instituciones en más de 140 países y ofrece un enfoque equilibrado entre el inglés académico y general.
Otra alternativa es el PTE (Pearson Test of English), que se presenta completamente en línea y es conocido por su rapidez en la entrega de resultados. También está el DELF (Diploma d’Études en Langue Française), aunque no es un examen de inglés, puede ser útil si estás considerando estudiar en Francia o en otro país francófono.
En resumen, aunque el TOEFL y el Cambridge son exámenes de primera línea, existe una variedad de opciones que pueden satisfacer necesidades específicas según el país destino, el tipo de institución y los objetivos del postulante.
El impacto de los exámenes en la vida profesional y académica
Presentar el TOEFL o el Cambridge puede tener un impacto significativo en la vida académica y profesional de una persona. En el ámbito académico, un buen puntaje en el TOEFL puede abrir puertas a universidades de prestigio en Estados Unidos y Canadá, lo que puede traducirse en oportunidades de becas, programas de investigación y redes de contactos internacionales. En el ámbito laboral, los exámenes Cambridge, especialmente los de nivel C1 y C2, son altamente valorados por empresas multinacionales que buscan profesionales con un alto nivel de comunicación en inglés.
Además, ambos exámenes son reconocidos por instituciones gubernamentales en muchos países para el procesamiento de visas de trabajo, residencia o inmigración. Por ejemplo, Canadá acepta tanto el TOEFL como el IELTS para visas de residencia permanente, mientras que Reino Unido acepta el Cambridge como parte de los requisitos para visas de trabajo.
En el contexto de la educación continua, obtener una certificación en inglés puede ser un requisito para acceder a programas de posgrado, intercambios académicos o cursos en línea impartidos por universidades internacionales.
El significado del TOEFL y el Cambridge en la evaluación del inglés
El TOEFL y el Cambridge representan dos enfoques diferentes en la evaluación del inglés como lengua extranjera. El TOEFL, desarrollado por el ETS, está diseñado específicamente para medir la capacidad de los no hablantes nativos de inglés para comprender y producir contenido académico en un entorno universitario. Su estructura está basada en simulaciones de clases universitarias, lo que le da un enfoque muy práctico para quienes buscan estudiar en universidades angloparlantes.
Por otro lado, el Cambridge, ofrecido por la Universidad de Cambridge, se basa en el Marco Europeo Común de Referencia para las Lenguas (MECR), lo que permite a los postulantes demostrar su nivel de inglés según una escala internacionalmente reconocida. Este enfoque hace que los exámenes Cambridge sean más versátiles, ya que pueden ser usados para propósitos académicos, profesionales y de inmigración.
En resumen, ambos exámenes son herramientas válidas para evaluar el nivel de inglés, pero su elección depende de los objetivos específicos del postulante.
¿Cuál es el origen del TOEFL y del Cambridge?
El TOEFL fue creado en 1964 por el Educational Testing Service (ETS) con el objetivo de ayudar a los estudiantes internacionales a demostrar su nivel de inglés para poder estudiar en universidades en Estados Unidos. A lo largo de los años, el TOEFL ha evolucionado para incluir versiones digitales, como el TOEFL iBT (Internet-based Test), que se ha convertido en el estándar actual.
El Cambridge, por su parte, tiene sus raíces en la Universidad de Cambridge, que comenzó a ofrecir exámenes de inglés en 1913. En 1998, la Universidad creó el Cambridge Assessment English, una división dedicada exclusivamente a la evaluación de idiomas. A través de los años, Cambridge ha desarrollado una serie de exámenes que cubren diferentes niveles de inglés, desde principiantes hasta niveles avanzados.
Ambos exámenes tienen un enfoque histórico en la evaluación del inglés como lengua extranjera, pero han evolucionado para adaptarse a las necesidades cambiantes de los postulantes y las instituciones educativas.
Otras formas de evaluar el inglés y su comparación con el TOEFL y el Cambridge
Además del TOEFL y el Cambridge, existen otras pruebas que también son ampliamente reconocidas. El IELTS, por ejemplo, es otro examen muy popular que combina elementos de ambos: mide el inglés académico y general, y es aceptado por más de 10,000 instituciones en 140 países. Otros exámenes como el PTE (Pearson Test of English) o el Duolingo English Test son opciones más modernas y asequibles, con resultados rápidos y formatos flexibles.
Comparando con el TOEFL y el Cambridge, el IELTS tiene una estructura similar al TOEFL, pero con más variedad en los contextos de habla y escritura. El PTE, por su parte, es completamente digital y se evalúa mediante algoritmos, lo que puede dar lugar a resultados más rápidos, pero también a menos flexibilidad en la corrección de los ensayos.
En cuanto al Duolingo English Test, es una opción más accesible y económica, ideal para quienes necesitan un examen rápido y desde casa. Sin embargo, aún no tiene el mismo reconocimiento institucional que el TOEFL o el Cambridge.
¿Qué examen es mejor para estudiar en Estados Unidos?
Si tu objetivo es estudiar en Estados Unidos, el TOEFL es generalmente la mejor opción. La mayoría de las universidades en Estados Unidos aceptan el TOEFL como parte de los requisitos de admisión, y muchas lo prefieren sobre otros exámenes. Además, el TOEFL está diseñado específicamente para medir el inglés académico, lo que lo hace más relevante para estudiantes universitarios.
Sin embargo, algunas universidades también aceptan el IELTS o el PTE como alternativas válidas. El Cambridge, aunque es un examen de calidad, no es tan común en el contexto universitario estadounidense, por lo que puede no ser aceptado por todas las instituciones.
En resumen, si planeas estudiar en Estados Unidos, el TOEFL es la opción más segura y ampliamente aceptada. Si tienes dudas, lo mejor es revisar los requisitos específicos de la universidad a la que deseas aplicar.
Cómo usar el TOEFL y el Cambridge en la vida diaria y académica
El TOEFL y el Cambridge no solo son útiles para el proceso de admisión a universidades o para buscar empleo, sino también para mejorar el inglés de una manera estructurada. Por ejemplo, prepararse para el TOEFL implica trabajar en habilidades específicas como la comprensión de textos académicos, la producción de escritos formales y la participación en discusiones sobre temas universitarios. Estas habilidades son muy útiles para estudiantes que quieren asistir a una universidad en un país angloparlante.
Por otro lado, el Cambridge ofrece una formación más general, lo que lo hace ideal para personas que necesitan usar el inglés en contextos profesionales, sociales o académicos. Por ejemplo, alguien que obtiene el Cambridge B2 First puede usarlo para viajar, trabajar o estudiar en países donde el inglés es una lengua franca.
Tanto el TOEFL como el Cambridge también pueden ser usados como parte de un plan de aprendizaje continuo. Muchas plataformas de aprendizaje ofrecen cursos específicos para prepararse para estos exámenes, lo que puede ser una excelente forma de mantener el inglés al día y mejorar progresivamente.
Errores comunes al elegir entre el TOEFL y el Cambridge
Uno de los errores más comunes es elegir un examen sin considerar los requisitos específicos de la institución o el país destino. Por ejemplo, si una persona planea estudiar en Reino Unido, podría equivocarse al presentar el TOEFL si la universidad prefiere el Cambridge. Por otro lado, alguien que quiere estudiar en Estados Unidos podría perder tiempo presentando el Cambridge si la universidad exige el TOEFL.
Otro error es asumir que un examen es más difícil que otro sin tener en cuenta el enfoque. El TOEFL puede ser más difícil para algunos postulantes si su nivel de inglés académico no es lo suficientemente alto, mientras que el Cambridge puede resultar más complicado para quienes no están acostumbrados a contextos profesionales o sociales en inglés.
También es común no revisar las fechas de los exámenes con anticipación, lo que puede llevar a postergar la inscripción o presentarse en fechas inoportunas. Lo ideal es planificar con tiempo suficiente y elegir una fecha que permita una preparación adecuada.
Recomendaciones para elegir entre el TOEFL y el Cambridge
Para elegir entre el TOEFL y el Cambridge, es fundamental seguir algunos pasos clave. Primero, identifica claramente tus objetivos: ¿quieres estudiar, trabajar o inmigrar? ¿En qué país? Luego, revisa los requisitos específicos de la institución o el país destino, ya que esto puede indicarte qué examen es más adecuado.
También es útil hacer una evaluación de tu nivel de inglés actual. Si tu inglés es principalmente académico, el TOEFL podría ser más adecuado. Si necesitas demostrar un nivel más general o profesional, el Cambridge puede ser la mejor opción. Además, considera factores como el costo, la disponibilidad de fechas y el formato del examen (en línea o presencial).
Finalmente, busca apoyo en cursos de preparación o en mentores que tengan experiencia con ambos exámenes. Esto puede ayudarte a elegir la opción que mejor se ajuste a tus necesidades y aumentar tus posibilidades de éxito.
INDICE